SAMMARTES DE ESCRITURA

Esto parece el metapost: háblemos de escribir, escribiendo.

Ironías de la vida. 

El caso es que es uno de mis hobbies, de esos de los que más disfruto y otro de esos que se podría relacionar con mi profesión en algún momento. Aunque no todo lo que escribimos se hace de la misma manera, sigue sin ser lo mismo hacer un guion, un libro, un poemario, un artículo, una crítica o practicar la escritura autmática (imagino que ahí estaréis de acuerdo conmigo). Pero, en el fondo, pienso que el escritor o la escritora, no permanece estático en el tipo de texto que escribe durante toda su vida. Al final, el que escribe, escribe y punto.

No quiero entrar en polémicas puristas sobre las características de cada texto. Sé perfectamente que cada uno tiene su aquel y que no todos los escritores sirven para ser polifacéticos dentro de este mundo que supone la escritura. 

Bien, yo no he aclarado que tenga que ser bueno lo que se escribe.
Es más, me juego la cabeza a que la mayoría de los textos que escribimos jamás ven la luz.

[Me refiero a que no se publican o no los lee nadie que no sea el escritor mismo, no hago referencia a si escribes a oscuras o con luz xD].

Así que, en el fondo pienso que todos los que sienten -o sentimos- el gusanillo de la escritura, escribimos. Escribimos desde hace tiempo y para siempre, de una manera que nos haga libres y que nos permita hacer tangibles los pensamientos que nos enclaustran. Haciendo posible ver desde los márgenes todo lo que nuestra mente guarda para poder aplicar una objetividad (aunque sea fingida) a la toma de decisiones en las que se basa la vida. 

No, no me considero escritora si es lo que os estáis preguntanto. No desde una manera pretenciosa, al menos (no más escritora que cualquiera cuando escribe un whatsapp, para que os hagáis una idea). 

Osea que, en resumen, vengo a decir que me gusta escribir y que es otra de las razones por las que sigo adelante con el ya tan arcaico "modo blog". Cada loco con su tema supongo.

P.D. A veces mis pensamientos son más engorrosos de lo que me gustaría admtir, por eso también escribo. Me obliga a ordenarlos. 

FIN DEL COMUNICADO

   

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